El papa Francisco, que se encuentra en Brasil con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud, intervino ante 1,5 millones de jóvenes en la playa de Copacabana para pedirles mantener el entusiasmo en la vida y no ceder ante tales tentaciones como el dinero y el poder, informó la prensa latinoamericana.
“He venido a contagiarme de su entusiasmo”, dijo el pontífice a la multitud congregada en Copacabana.
El papa agradeció la alta asistencia al evento a pesar del mal tiempo.
“Quiero agradecer el testimonio de fe que están dando porque es más fuerte que el frío y la lluvia”, subrayó.
Francisco llamó a los jóvenes a huir de la codicia.
“Es verdad, el tener, el dinero, pueden generar un momento de embriaguez, la ilusión de ser feliz” y “al final son ellos quienes nos poseen y nos llevan a querer tener siempre más, a nunca estar saciados. Es muy triste tener una vida saciada y sin embargo débil”, advirtió.
También aconsejó a los jóvenes a ser amigos de Jesús.
“Pon a Cristo en tu vida y en él encontrarás un amigo en el que confiar, pon a Cristo y verás crecer las alas de esperanza para recorrer con alegría el camino del futuro, pon a Cristo y tu vida estará llena de amor, será una vida fecunda. Porque todos queremos una vida fecunda”, dijo el papa durante su discurso ente los peregrinos brasileños.
RIA Novosti
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